LOS ANDES (10/09/2019).- Tras cinco días de juicio, el Tribunal de Juicio Oral en lo penal de Los Andes condenó a 18 años de cárcel a José Alejandro Vargas Vargas (38), alias el "Zapato Feo" o "Zapato Viejo" (Ver foto ampliada) por el delito de homicidio calificado perpetrado en contra de Juan Contreras Cordero (73) conocido como el "Corbata", hecho ocurrido la tarde del 9 de marzo de 2016 en la calle Los Olmos de la comuna de San Esteban.
El tribunal, integrado por los magistrados Carlos Muñoz, Enrique Cossio y Alessandra Tubino llegó a la convicción, en base a la prueba presentada por el Ministerio Público a través de su fiscal Raúl Ochoa Capelli, de la participación del condenado este abominable crimen que tuvo por finalidad el robo del dinero que portaba la víctima.
Conforme a los establecido en la investigación liderada por el fiscal Raúl Ochoa y el ex Jefe de la Brigada de Homicidios de Los Andes, Subprefecto Gino Gutiérrez, el día 9 de marzo del año 2016 la víctima se encontraba en su domicilio ubicado en la comuna de Santa María, llegando al lugar a las 17:15 horas aproximadamente el "Zapato Feo" que le solicita realizar una carrera, toda vez que la víctima se dedicaba al transporte informal, abordando el auto Chevrolet, modelo Astra Station, color bourdeo, placa patente TC5478, dirigiéndose por calle Irarrazabal, para posteriormente salir al sector el tambo y desde ahí a avenida Tocornal para luego enfilar por dicha arteria hacia el oriente hasta la calle los Olmos de la comuna de San Esteban, donde el vehículo ingresó por el acceso a Esval saliendo del lugar al ver a personas en el sector retornando posteriormente hacia los Olmos en dirección al oriente.
Es en el camino Los Olmos, frente a un sitio eriazo donde a la vereda del camino hay un cerco divisorio, es que el José Vargas atacó de forma sorpresiva a la víctima, quien se encontraba en la imposibilidad de defender por encontrase manejando el vehículo.
El fiscal señaló que cuando el auto se detuvo, el "Zapato Viejo" atacó al anciano con un cuchillo marca Tramontina con una hoja de 7 centímetros, propinándole al menos ocho estocadas en la zona torácica y golpeándolo con una piedra.
A pesar de sus heridas la víctima ensangrentada logró bajarse del auto, " momento en el que pasa una camioneta marca Ford color azul, con tres personas en su interior, pudiendo los tres divisar a la víctima pidiendo auxilio y su lado a un sujeto que fue reconocido como el imputado".
Al ver esta macabra escena, el conductor de la camioneta echó marcha atrás, huyendo del lugar para luego dar aviso a Carabineros de lo que estaba ocurriendo.
Posteriormente una motocicleta pasó por el lugar y su conductor también observó a la víctima ensangrentada pidiendo auxilio, reconociendo al imputado como la persona que estaba junto a él.
De esta circunstancia se aprovechó la víctima para subirse a su automóvil y huir por calle Los Olmos en dirección al oriente, deteniéndose frente a una población donde trató de pedir ayuda, falleciendo a eso de las 18:10 horas de esa tarde mientras era atendido por personal de SAMU que había sido llamado por testigos.
Mientras ello ocurría el "Zapato Viejo" huyó del lugar cambiándose de ropa en el trayecto, para luego dirigirse a la casa de su pareja en ese entonces para ocultarse.
El asesino le dijo a la mujer que tenía una herida cortante en su mano izquierda debido a que se había cortado con una lata mientras realizaba un trabajo, concurriendo junto a ella hasta el Servicio de Urgencia del Hospital San Camilo cerca de las 22 horas de ese día.
El persecutor precisó que durante el transcurso de la investigación el imputado declaró haber estado con la víctima y que ambos fueron asaltados por un tercero, no refiriéndose en detalle al supuesto atraco ni tampoco efectuó la denuncia por este hecho a la policía, lo que refuerza la tesis de su participación directa en el crimen.
Además, en el sitio de suceso fue encontrado el teléfono celular del adulto mayor y un fajo de billetes, además de su reloj, " lo que da cuenta claramente que esto no se trató de un asalto, dando una burda explicación respecto de por qué estaba en el sitio del suceso y cuatro personas que pasan por el lugar, los ocupantes de la camioneta y el motociclista aseguran haber visto dos personas, una lesionada y herida que solicita auxilio y la otra que corresponde al imputado a quien reconocen plenamente".
El fiscal dijo además que las muestras de sangre obtenidas del cuchillo y de la piedra con que fue agredida la víctima dan cuenta de la presencia de dos ADN, uno del fallecido y el otro que es compatible con el del "Zapato Viejo" (Ver foto ampliada).
Por tan alevoso crimen el fiscal Ochoa remarcó que se estaba en presencia del delito de homicidio calificado, solicitando una pena de presidio perpetuo calificado (Es de decir 40 años de cárcel para recién poder optar a algún beneficio intrapenitenciario)
El fiscal fundamentó esta pena porque existía una relación de confianza y amistad entre ambos sujetos, "la víctima estaba realizando una carrera por un trabajo que el imputado le pidió realizar, le pidió que lo llevara a un lugar donde circula poca gente, a un sitio donde podía cometer este ilícito. Así la traición y sobre seguro es evidente, porque cuando una persona maneja un vehículo, está preocupado de conducir, de los cambios, de mirar hacia adelante y de los espejos. Se trata de una persona que era conocida, y que inventó y creó una situación para llevarlo a un lugar alejado, que le empiezan a pegar puñaladas en la zona torácica y donde no existe posibilidad alguna de defensa".
"Se creó, además, una situación engañosa respecto de la víctima en términos que ella no tenía posibilidad de saber que iba a ser atacado", añadió el representante del Ministerio Público.
Cabe recordar que el "Zapato Feo" fue detenido en agosto de 2018, más de dos años de ocurrido el crimen debido a la complejidad de obtener pruebas científicas que permitieran la participación del antisocial en este crimen.
Además, el ahora condenado registra antecedentes penales por otros delitos, incluso cumple actualmente una condena en la cárcel de San Felipe por otro ilícito.
En virtud de todo ello es que el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Los Andes resolvió condenar a José Vargas a sufrir la pena de 18 años de presidio mayor en su grado máximo, y a las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la de inhabilitación absoluta para profesiones titulares por el tiempo de la condena, por su responsabilidad en calidad de autor del delito consumado de homicidio calificado.
Asimismo, el tribunal estableció que por no reunirse en la especie los requisitos de la Ley 18.216 y sus modificaciones, el cumplimiento de la pena privativa de libertad deberá ser efectivo, la que comenzará a cumplir sucesivamente y sin solución de continuidad una vez cumplida la condena por la que actualmente se encuentra recluido, sirviéndole de abono el tiempo que permaneció privado de libertad por esta causa.
Finalmente el tribunal ordenó que Gendarmería tome muestras de ADN del condenado para ser incorporado a la base de datos de condenados por pena de crimen.
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