RINCONADA (27/12/2024).- Personal de Carabineros de la Tenencia de Rinconada detuvo a un hombre nacionalidad chilena, sin antecedentes policiales, quien amenazó con matar a su hijo disparándole con su arma de fuego el día de Navidad.
De acuerdo a los antecedentes del Ministerio Público obtenidos en exclusiva por Los Andes Online, el hecho se registró a eso de las 8:30 horas del 25 de diciembre al interior de un inmueble ubicado en la calle Gálvez donde se encontraba el trabajador J.E.V.V., de 59 años, en compañía de su grupo familiar.
En un momento su hijo de 28 años le pidió que bajara el volumen de la música, pero el hombre debido a su estado etílico se enardeció y tomó un revolver que mantenía sobre la mesa del comedor y le apuntó directamente a la cabeza, amenazándolo que le daría muerte.
Ante ello, el hijo reaccionó y en una rápida maniobra logró quitarle el arma antes que le disparara, para salir luego de la casa y lanzar el arma hacia un potrero colindante.
Posteriormente decidió denunciar el hecho ante Carabineros, concurriendo de forma inmediata una patrulla Mixta de Seguridad Municipal.
Al llegar se entrevistaron con la víctima y tras conocer los antecedentes detuvieron en el acto al jefe de hogar que estaba completamente borracho.
Asimismo, lograron recuperar el arma correspondiente a un revólver calibre 22 de origen argentino con su número de serie borrado y siete municiones también con su número de serie borrado.
Es por ello que el Ministerio Público dispuso que el hombre fuera pasado a control de detención en el Juzgado de Garantía de Los Andes la mañana del jueves.
En la audiencia, el fiscal adjunto Rodolfo Robles Mora lo formalizó por los delitos de amenazas, tenencia de arma prohibida y tenencia ilegal de arma de fuego.
Por la multiplicidad de los delitos, la alta pena asignada a estos, el persecutor pidió aplicar la cautelar de prisión preventiva.
Sin embargo, la defensora pública Ana-Karem González Casanova se opuso, argumentando que su representado no mantenía ningún tipo de antecedente penal y nunca había estado en un tribunal del crimen, razón por la cual la consideraba demasiado gravosa.
Con los argumentos expuestos, el magistrado Daniel Chaucón Ojeda consideró su libertad como un peligro para la seguridad de su hijo, accediendo a lo solicitado por el Ministerio Público y ordenando su ingreso al Centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes.
Asimismo, el juez estableció un plazo de sesenta días para el cierre de la investigación.
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