El ministro Briones durante la discusión del retiro del 10% de los fondos de pensiones, al que se opuso y rechazó, describió el contexto como un ”momento estelar”, y aunque él no estaba de acuerdo con el retiro del 10% me pareció poético, contradictorio, pero hermoso, porque efectivamente esta época que puede ser oscura producto de los errores y la maldad del pasado y presente, pero tiene el potencial de ser una de las mejores oportunidades para quitarnos de encima el estigma que a sangre y fuego lacera nuestras consciencias, impidiendo un futuro de desarrollo.
Soy de los que canta el himno nacional con el pecho inflado con la mano en el corazón, amo el mote con huesillo y la empanada de pino, amo a la hermana nación mapuche y su mitología, caicai vilu y trentren vilu hicieron explotar mi cerebro con su poder, y todos los primeros pueblos que disfrutan de esta hermosa tierra. Cuando estaba en la básica del liceo uno, me encantaba ver todas esas salas con nombres de países, cantar del himno de las américas y disfrutar de ese “inmenso jardín” que como decía Nino Bravo es América. Por esos tiempos hice una pequeña investigación acerca de los partidos políticos, fui a todos los que había (RN, UDI, DC, PPD, PS y PC) y lo que recuerdo es que me pareció que todos querían lo mismo, un mejor Chile, también por esos tiempos me acerqué a la iglesia católica, asistía “religiosamente” a misa, hice la primera comunión y de monaguillo, salí indemne, y experimente una creencia y fe.
Hoy no profeso ninguna religión, ni tampoco pertenezco a ningún partido político, hoy me guía la capacidad creativa del ser humano, el poder de la naturaleza y el infinito viaje de la luz en el universo.
Hoy es tiempo de creer en nosotros. Víctor nos cantaba que “el hombre es un creador” y en un sencillo pero sublime acto al trazar una línea en Apruebo y luego en convención constitucional, ahora hombres y mujeres podrán crear un nuevo Chile en igualdad.
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