El presidente Piñera, según trascendidos de la prensa nacional, específicamente Radio Bío Bío, ha señalado a principios de esta semana la factibilidad de la creación de una Región de Aconcagua, esto si así un estudio que él ordena realizar lo recomienda. Eso dice la prensa. Reconocemos, valoramos y agradecemos la voluntad de su excelencia, tan contraria a lo que anteriormente habrían manifestado y expresado tanto el Intendente así como el Sub Secretario de Desarrollo Regional, aún es más, aprovechamos de señalar que dicho estudio ya fue encargado, se realizó y se arroja como resultado la pertinencia de esta nueva Región, que comprenderían las Provincias de Petorca, San Felipe y Los Andes.
En otras palabras, el estudio ya está, para qué gastar más dinero, sobretodo, a propósito que se está imponiendo el principio de austeridad, según nos cuentan.
Nuestra demanda y aspiración no es algo sin sustento o expresión de mero chovinismo, como ya lo hemos señalado anteriormente , el centralismo es uno de los tumores más grandes que tiene nuestro país, cuyo diagnóstico ha sido desde ya hace mucho tiempo por todos los sectores del país reclamado, sin avances efectivos, salvo estos últimos años con la ley que posibilita la anhelada elección de Gobernadores Regionales, que es una tremenda noticia, para Valparaíso, Viña y sus alrededores, pero para nosotros no.
Otra medida de descentralización fue la nueva Ley de Creación de Plantas municipales, que otorga posibilidades de mayor autonomía a los municipios, pero en que el Estado cubre cerca de un 30% del financiamiento, soportando el otro 70% nuevamente las ya famélicas arcas de los municipios de Chile.
Dos son las grandes soluciones que teóricamente ha propuesto el mundo de la teoría para abordar el tema de la descentralización. La Primera, a través de la generación de macro regiones, principalmente tres; Norte, Sur y Centro, tesis que al parecer mantiene mi distinguido colega Intendente, entre otros. No creo que sea una solución, nuestra región quedaría dentro de la macrozona central compuesta por Santiago y Valparaíso y que actuarían como una fuerza centrípeta, centralizando más aún el crecimiento, el desarrollo y distribución del poder, y marginándonos aun más de lo que ya nos ha tocado. Podríamos profundizar más al respecto.
La otra fórmula es el retorno a las Trece Provincias, las cuales desaparecieron en el año 1975 y que fueron fruto y producto del devenir de nuestra historia republicana por más de 150 años, estas Provincias hoy serían denominadas Regiones, simplemente como siempre fue. Regiones con propuestas de desarrollo claras, respaldo técnico, territorializadas, con plazos y estrategias locales, basadas en la cultura e identidad del propio Territorio, y por supuesto con el máximo aprovechamiento del capital social existente, dirigida por líderes con verdadero arraigo local y no extraños como ahora, con espacio y fomento para las energías creadoras de empresas privadas, que tributen para la región, y que sus casas matrices no se encuentren en Santiago, como ocurre por ejemplo con 48 de los 49 grandes grupos económicos de nuestro país.
Vuelvo al origen, agradecemos la intención de nuestro presidente, ojalá esta se materialice, una buena noticia para empezar sería que el Intendente, así como el Sub Secretario de Desarrollo Regional contestaran la solicitud de audiencia solicitada por la Asociación de Municipalidades de la Región de Aconcagua hace ya más de veinte días.
|
