Se ha debatido largamente sobre los grandes temas asociados a la reforma tributaria, tales como la eliminación del FUT, el aumento de la tasa de primera categoría, entre otras. No obstante, hay un tema extremadamente relevante que ha pasado desapercibido del debate ciudadano: el impacto de la aplicación de la normativa contable internacional IFRS. Es necesario saber que IFRS es un estándar internacional de contabilidad, que fue adoptado por Chile gradualmente a contar del año 2009 y completamente a contar del año 2013. A pesar de aquello, la inmensa mayoría de las empresas en Chile, aquellas que no están reguladas por la SVS, siguen llevando su contabilidad de acuerdo a nuestra ahora obsoleta norma local. ¿Qué implicancia práctica tiene eso? Hasta ahora ninguna, puesto que las empresas no están obligadas a adoptar la norma, en la medida que un tercero no lo exija, tal como un banco, un inversionista o un auditor externo.
Por otro lado, en términos prácticos, las pequeñas empresas llevan contabilidad siguiendo criterios tributarios más que financieros. Sin embargo, si se revisa en detalle el texto de la reforma tributaria, este indica expresamente que para controlar las utilidades atribuidas, se deben llevar varios registros, debiendo consignar las "diferencias temporales que surjan de la aplicación de las normas contables o financieras que se deban aplicar". En ese contexto, la norma contable o financiera a aplicar, es la IFRS. Adicionalmente, se señala que el SII podrá impugnar fundadamente los valores contables o financieros declarados, cuando estos no sean consistentes con las prácticas contables o financieras generalmente aceptadas. Otra vez IFRS. Lo anterior implica un salto gigantesco para todos los que trabajamos en el área de la contabilidad, dado que en la práctica, aún existe mucha falta de capacitación y conocimiento de las IFRS, que dicho sea de paso, constantemente están cambiando, y que, según el texto de la norma, pasarían a ser, legalmente obligatorias para todas las empresas que lleven contabilidad completa. Recordemos también que la reforma suprime varios regímenes de renta presunta y simplificados, por lo que la cantidad de empresas en contabilidad completa, cuando ésta entre en vigencia, aumentará drásticamente. Gran desafío también para el SII, quién por mandato legal, ahora podrá (y tendrá) que impugnar la contabilidad construida bajo IFRS, una norma que es conceptualmente muy distinta a las normas tributarias que ellos manejan.R03;
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