ACONCAGUA (20/04/2017).- Cuero original, trabajo de primera calidad y confección cien por ciento a mano. Esa es la promesa de Marcos Bustamente, interno del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe que se está convirtiendo en el zapatero oficial del grupo La Noche.
Los comentarios sobre la calidad de su trabajo y los diseños únicos creados por este hombre de 45 años convencieron a Juan San Martín y Cristian Berríos, timbalero y guitarrista del famoso conjunto de cumbias oriundo del Valle del Aconcagua, y mandaron a hacer dos pares de zapatos dignos de unos músicos que han recorrido todo el país y el extranjero.
“Supimos del trabajo de los internos del penal de San Felipe. Esto lo hacemos para la reinserción de los internos… Súper satisfecho con los trabajos, es muy buena la calidad, puro cuero. Totalmente recomendable”, sostuvo Juan San Martín.
Por su parte Cristian Berríos destacó que: “Me probé los zapatos y me quedaron perfecto, así que súper contento con el trabajo. Recomiendo cien por ciento de que vengan los músicos de la zona; muy buen precio y pueden tener su vestimenta personalizada”.
Tan satisfecho como los músicos estaba Marcos Bustamente. Para él los zapatos son mucho más que un oficio, se trata de un trabajo familiar que iniciaron sus tíos, y que hoy concentra toda su pasión.
Según explica, el proceso de creación de cada uno de los pares que ha realizado a pedido comienza prácticamente de la misa forma.
“En base a una fotografía que me traen yo saco el diseño y luego se realizan los cortes y se cosen en máquina. Lo único que se hace en una máquina es la costura, todo lo demás es hecho totalmente a mano. Aquí ofrecemos muy buenos precios, mejores a los del comercio establecido. Con estos dineros se puede ayudar a nuestras familias y tratamos de superarnos”.
Fue tal la gratitud de Bustamente por la confianza depositada en él y en sus capacidades que al momento de entregarles los zapatos les regaló dos plantillas de cobre que el mismo confeccionó.
El zapatero sanfelipeño trabaja todos los días y comparte el espacio con cerca de una decena de reclusos que se esmeran en convertir el cuero en hermosas prendas.
El buen trabajo que efectúan fue captado inmediatamente por el nuevo jefe del CCP de San Felipe, mayor Felipe Cornejo, quien se ha propuesto que toda la comunidad sepa de la labor que realiza este grupo de personas privadas de libertad.
“Nuestra intención, básicamente, es dar a conocer a la comunidad la gran calidad con que trabajan los internos de la unidad penal. Los internos trabajan en un sin número de cosas, entre ellas: carteras, cinturones, zapatos y además tenemos unos mueblistas que tienen una calidad impresionante”.
Con los internos comprometidos en su trabajo y un jefe de unidad que se esfuerza por lograr que las personas se acerquen a comprar sus productos las puertas del establecimiento sanfelipeño están abiertas para quien desee darle una oportunidad a quienes tanto la anhelan.
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